Recientemente, el presidente alemán, Christian Wulff, anunció su dimisión tras desvelarse que cuando fue primer ministro regional había aceptado un crédito privado con unas condiciones muy ventajosas de empresarios amigos por medio millón de euros.
Por otro lado, en España dirigentes del Partido Pupular reconocen
que cobraron y siguen cobrando sobresueldos del partido como si fuera algo
normal. Estas cantidades de dinero, que se suman al sueldo que reciben cada mes,
las denominan “gastos de representación”, que pueden llegar a sumar ni más ni
menos que 10.000 euros mensuales.